A finales de la semana pasada, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, confirmó las expectativas del mercado al anunciar que era el momento de recortar la tasa de interés de referencia de Estados Unidos. Este anuncio ha reforzado la perspectiva de que los funcionarios comenzarán a reducir los costos de endeudamiento en la próxima reunión, con el objetivo de evitar una mayor desaceleración en el mercado laboral.
Como resultado de estas declaraciones, el par EUR/USD experimentó un significativo impulso alcista, alcanzando el nivel de resistencia clave de 1.1200, el más alto en más de un año. Este nivel marcó un importante hito, reflejando la creciente confianza en la fortaleza del Euro frente al debilitado Dólar estadounidense.
El par cerró la semana cerca de sus ganancias, lo que sugiere que los inversores están atentos a los próximos movimientos del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal, así como a cualquier dato económico que pueda influir en las expectativas de política monetaria. Sin embargo, este nivel de 1.1200 es crucial, y el Euro necesitará un impulso adicional para consolidar su posición por encima de esta resistencia.
Las próximas semanas serán decisivas para determinar si el par EUR/USD puede mantener su tendencia alcista o si veremos un retroceso a medida que los mercados digieran las decisiones de política monetaria y los datos económicos que están por venir.
El discurso de Jerome Powell en el simposio de Jackson Hole marcó un momento crucial para la política monetaria de Estados Unidos. Al declarar que "ha llegado el momento de ajustar la política", Powell dejó entrever un posible cambio hacia una postura más acomodaticia, lo que fue interpretado por los mercados como una señal de posibles recortes en las tasas de interés. Esta interpretación generó una reacción positiva en los mercados bursátiles, ya que los inversores anticipan que la Reserva Federal podría reducir las tasas para evitar una mayor desaceleración del mercado laboral y seguir apoyando la economía.
Los funcionarios de la Reserva Federal también sugirieron que un recorte de medio punto podría ser probable si los próximos datos de empleo, programados para el 6 de septiembre, muestran más signos de debilitamiento en la contratación. Esto refuerza la expectativa de que la Reserva Federal podría actuar agresivamente si la inflación sigue disminuyendo.
En Europa, las expectativas para el Euro son mixtas. Mientras que los datos globales de la Eurozona fueron más positivos, las cifras alemanas pintan un panorama sombrío. El índice de gestores de compras (PMI) del sector manufacturero alemán cayó a un mínimo de cinco meses, lo que refuerza la preocupación por la economía alemana, que sigue luchando con una recesión en su sector manufacturero. Los nuevos pedidos cayeron significativamente, lo que sugiere que los problemas podrían empeorar en los próximos meses.
Por otro lado, el PMI del sector servicios de la Eurozona mostró un crecimiento más fuerte de lo esperado, lo que proporciona un cierto alivio. Sin embargo, el aumento en los precios de producción podría presionar al Banco Central Europeo (BCE) a considerar un ajuste en su política monetaria, aunque las expectativas actuales apuntan hacia recortes en las tasas de interés en 2024.
En resumen, mientras que el Dólar estadounidense podría enfrentar presión a la baja si la Reserva Federal avanza hacia una política más acomodaticia, el Euro se encuentra en una encrucijada, lidiando con la debilidad económica en Alemania y señales mixtas en el resto de la Eurozona. Los próximos datos económicos y las decisiones de política monetaria serán cruciales para determinar la dirección futura de ambos pares de divisas, con el EUR/USD particularmente vulnerable a las fluctuaciones en las expectativas de los bancos centrales y los datos económicos clave.
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